14°
12°
Tres ideas para hacer senderismo en los alrededores de Aviñón © Genestal

Tres ideas para hacer senderismo en los alrededores de Aviñón

Circuitos sin dificultad y con una distancia controlada que aparecen como prólogo o epílogo en un día de vacaciones en o en los alrededores del Gran Aviñón. Si está pensando en guardar los zapatos hasta que llegue el otoño, ¡le proponemos tres itinerarios para romper el descanso!

Duración

3 horas

Tipo:

Senderismo

1 – La Barthelasse: la más insular

Lo esencial de la isla en versión reducida

La Barthelasse es una isla sorprendente que surge entre dos brazos del Ródano y que es el enlace entre el departamento de Gard y el de Vaucluse.
Se puede hacer una larga caminata por la orilla en la que se pueden ver las murallas de Aviñón y el puente de Saint Bénezet que es de lo mejor de Aviñón. Se trata de un mundo verde con altos robles y juncos que abrazan el curso del río. Un refugio apreciado y un lugar para resguardarse del calor. En este lugar, los caminos conducen al agua y las puertas de hierro forjado se abren a barcazas que llevan los nombres de las novelas de Saint-Exupéry.

Dentro, el ambiente cambia: los árboles frutales remplazan a los robles y los bosques se borran ante extensiones de cultivos. Los huertos compartidos y las ventas de productos agrícolas invitan a la gente a abrir sus puertas y llenar las cestas de mimbre. Entre los intimistas senderos y las pequeñas vías asfaltadas, l’Île de la Barthelasse es el pulmón de la naturaleza de la Ciudad de los Papas.

le saviez-vous ?

¿Sabía que…?

Esta isla fluvial es la mayor de Europa por sus 700 hectáreas de tierra fértil, fruto de la combinación de muchas islitas por el paso de los siglos, y por el inmenso espacio natural, flanqueado por un extraordinario bosque ribereño. Su nombre se debe a Jean-Richard d’Avignon, alias Barthelucius, que firmó un contrato de arrendamiento con la abadía de Saint-André en 1447 para cultivar allí trigo.

La Barthelasse: la más insular

Datos prácticos

En detalle:
– Distancia: 11 km
– Desnivel: 17 m
– Duración: 3h
– Dificultad: fácil

bus

Acceso desde el centro de Aviñón a pie o en bus por Orizo (línea 5)

2 – La Parisienne: la más histórica

La Parisienne: la más histórica
le saviez-vous ?

¿Sabía que…?

La Parisienne era el nombre de un barrio de Cambuisson donde se fundó a mitad del siglo XIX una de las tres fábricas de yeso. Aquí se escribió una de las grandes páginas de la historia del yeso local hasta su cierre en 1966 después de la fusión seis años más tarde con un pez gordo como el grupo Lafarge.

Un paso por la orilla del canal de Carpentras

Para empezar, el recorrido abraza el agradable curso del canal de Carpentras, que tiene 170 años, que se mueve al plácido ritmo de una corriente constante que viene desde el Durance. Un camino más bien amplio, de sirga, que permite a los caminantes seguir el curso durante algunos kilómetros de puente a puente. A continuación, las señales ascienden por el barranco de Pouyaque, el único desnivel real de una ruta que prácticamente no tiene ninguno. La sombra de los robles viste de negro un amplio camino gredoso a la orilla del cual los cardos azules estallan en fuegos artificiales malva y violeta. Se pueden ver fósiles de armazón que cuentan historias de los días anteriores a que los pinos dominaran la tierra, cuando el campo estaba habitado y cultivado. Más adelante, las uvas crecen a escondidas de las miradas, junto a olivos y cerezos y a las misteriosas ruinas de Rouxel. Hay un último enlace antes de llegar a la gran pista que desciende desde Piègros y que le lleva de vuelta al puente des Arrayiès.

Datos prácticos

En detalle:
– Distancia: 6 km
– Desnivel: 107 m
– Duración: 1h
– Dificultad: fácil

3 – L’Islon-Saint-Luc: el más natural

A la búsqueda del brazo des Arméniers

L’Islon-Saint-Luc es un enclave minúsculo, clasificado como Natura 2000 y ZNIEFF (Zone naturelle d’intérêt écologique, faunistique et floristique, es decir, zona natural de interés ecológico, de fauna y de flora), que se interpone entre los viñedos de Chateauneuf du Pape y l’Île de l’Oiselet del que lo separa el brazo des Arméniers. En este islote verde, bañado por aguas corrientes perezosas que le dan quizás un aire de manglar, pían unas sesenta especies de pájaros y nadan una veintena de especies de peces. Incluso se cuenta que se podría ver algún castor. Lo que sorprende aquí es la exuberancia de la cubierta vegetal. Aunque el aliso, el fresno y el olmo campestre se consideran las variedades autóctonas, lo que impresiona principalmente es la talla de los robles y de los álamos blancos. La vuelta a Islon-Saint-Luc es uno de esos agradables paseos entre la maleza, favoritos de las familias francesas los domingos después de una buena comida familiar. Un baño de naturaleza en su más simple expresión para olvidarse de los cálidos días de verano.

Info pratique

Información práctica

El brazo des Arnéniers es el fruto de una restauración paciente que se acabó en 2015 hecha por la Compagnie Nationale du Rhône, es decir, la compañía nacional del Ródano. Se desconecta del río y se alimenta esencialmente por un contracanal que viene de la Meyne. Muchos paneles de información cuentan esta historia que favorece la vuelta de la biodiversidad y de la continuidad ecológica.

L'Islon-Saint-Luc: el más natural

Datos prácticos

En detalle:
– Distancia: 3 km
– Desnivel: 6 m
– Duración: 1h
– Dificultad: fácil

bus

Posible acceso en bicicleta por la Via Rhona, desde Caderousse, Aviñón y Sorgues.
En autobús desde Aviñón: el 902 hasta Sorgues y luego, el 922 hasta Châteauneuf-du-Pape

Tres circuitos muy fáciles para saborear durante todo el día y que demuestran que hacer senderismo en verano en Vaucluse es posible y agradable. Esto sirve para combinar con una visita más completa el potencial turístico del Gran Aviñón cuando se va a la Ciudad de los Papas.

David Genestal

David Genestal,

Carnets de Rando